Cómo hacer panellets con niños

Se me hace la boca agua cuando pienso en los panellets que hicimos con mi madre, mis hijos y sobrinos el fin de semana en casa. Umm… qué buenos y qué bien lo pasamos.

¿Alguna vez has probado a hacer un pastel o un dulce típico con los más peques de la casa? Te aseguro que es una forma muy divertida de hacer una actividad juntos y de dejar que cada niño exprese su creatividad. En general, les encanta tocar y experimentar con los ingredientes. 

PANELLETS: UNA TRADICIÓN DULCE

La noche del 31 de octubre, víspera de Todos los Santos, en Cataluña celebramos la Castañada, una fiesta tradicional en la que nos reunimos con amigos o en familia y es típico comer castañas, moniatos y panellets.

El día 1 y durante la primera semana del mes, algunos durante más días :), seguimos disfrutando de estos pastelitos que suelen tener una forma redonda. Los hay de piñones, coco, membrillo, chocolate, con trocitos de almendra, etc. Aunque los más típicos son los de almendra y piñones. Precisamente los que preparamos nosotros.

Joana cada año hace panellets y este ha contado con unos ayudantes fantásticos y muy atentos.

Momentos antes de comenzar con todos los ingredientes preparados. 

Toma nota de lo que necesitáis para hacer panellets:

- 250 g de harina de almendra.

- 250 g de azúcar.

- La ralladura de un limón.

- 1 huevo.

- 60 g de piñones.

- 50 g de almendras crudas enteras.

Después ponéis en un bol el azúcar con la ralladura de un limón y añadís la harina de almendra. Todo bien mezclado. Cascáis un huevo y separáis la yema de la clara. Solo se añade 3/4 de yema. La clara se reserva. Mezclad de nuevo bien. Es ideal dejar reposar un rato la masa. Si ha quedado un poco seca añadid el resto de la yema y otra vez a mezclar.

Joana y los niños pasándolo en grande en plena faena. Y yo detrás de la cámara pero ¡también colaborando!

Cuando tengáis la masa lista llega la parte preferida de los niños: separar la masa y hacer pequeñas bolas. Tendrías que haber visto las caras de concentración tratándolo de hacer lo mejor que podían. ¡Son todos unos chefs!

Una vez tengáis los panellets hay que ir añadiendo los piñones en algunos y en otros lo trocitos de almendra hasta recubrir toda la masa. Untad un pincel con la clara y barnizad los panellets para que queden dorados.

El último paso es ponerlos en el horno a 150º-160º durante unos diez minutos.

¡Tachán! Y al final lo mejor: una irresistible bandeja de panellets hecha con mucho cariño.

Los panellets salieron buenísimos pero sobre todo disfruté de mis hijos sin importarme si la cocina se ensuciaba más de la cuenta o si yo llevaba masa hasta las orejas. ¡Estos momentos son irrepetibles! Vívelos intensamente. 

Y tú, ¿tienes alguna receta que hayas preparado con tus hijos? Cuéntanosla y así practicamos otro fin de semana.

Un abrazo,

Joana y Raquel - Petit Koala